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"Considero que el vino está igualmente muy ligado a la cultura, con una simbología social muy importante, por lo que de manera directa o indirecta seguro que hay más de un diseñador que se ha sentido seducido por el vino a la hora de crear", estas son las palabras de la diseñadora María Barros al comentar su desfile de primavera-verano 2014 titulado Coupage.
Tintos, blancos y rosados fluyendo por la pasarela de Mercedes-Benz Fashion Week Madrid como de la botella a la copa. Era la primera vez que una diseñadora española dedicaba su colección íntegramente al vino. "Es un mundo de sensaciones, y éstas son siempre personales. Esto se transmite en tejidos, colores y siluetas que me sugiere tanto el vino como su proceso de elaboración y entorno natural, que es el inicio de todo".
La colección cuenta con la colaboración de Cristina Alcalá, reconocida sumiller, enóloga y periodista especializada y está basada en los diferentes procesos creativos del vino y sus elementos de producción natural. Las siluetas reflejan ese homenaje vinícola marcando una línea femenina y romántica. Y los tonos típicos del vino, los tierra, florales y cítricos, componen la principal paleta cromática de esta colección rica en detalles.
Imágenes del Desfile Primavera Verano 2014
